Hace un tiempo atrás recuerdo que fui al cine con mis primos y, ya que no pudimos entrar a ver la pelicula porque la fila del cine daba 10 vueltas y luego una más a todo el lobby del cine, pues decidimos ir a comer. Después de pedir y nos sentamos a hablar de series de televisión y cuanto lo increíblemente mala que se había puesto Smallville. Una cosa llevo a la otra y terminamos hablando de Resident Evil y los SUSTOS que uno se da con esa vaina.
Todavía se me acelera el corazón recordando la primera vez que jugué; fue memorable. El juego me lo prestó un vecino, yo llegué a mi casa emocionada porque todo el ser viviente, en el mundo de los juegos, me había hablado de el y yo TENÍA que saber que droga subliminal era que estaba involucrada en eso. Busqué el juego y subí las escaleras tan rápido que la puerta no se había terminado de cerrar y ya el juego iba por el menú principal. Elegí mi jugador y empecé a moverme, caminando muy lentamente revisando cada esquina, bueno no realmente, trataba de mantenerme lo mas lejos posible de esquinas y lugares donde se hiciera fácil a una manada de zombies acorralarme. El juego es tan sádico que no tiene música para que tu pongas el volúmen a «TOH» ya que no se oye casi nada más que los pasos del jugador.
El gancho esta en que cuando te sale un m**dito zombie esa vaina suena como que llegaron los jinetes del Apocalipsis a buscar, y que el sol se esta cayendo, y los terremotos y demás. Pues yo estoy ahí, jugando «chillin». Recuerdo que había un carro en llamas a la izquierda y la cámara estaba, muy convenientemente, en un posición que NO me permitia ver lo que había del otro lado del carro. Efectivamente, en el momento que le pase por al lao me salio el mismo el verdadero Zombie. La bocina de la televisión mas nunca volvió a servir del ESCANDALO que hizo ese hijo e’ su madre cuando me brinco encima. Yo le di a pausa como 10 veces porque, como suele suceder, cada vez que le daba la vaina se pausaba pero los nervio me hacían darle de nuevo y se quitaba la pausa y volvia el escandalo y entraba el pánico! Y yo gritaba, y el Zombie disfrutando su gran manjar de mi piel (o mejor dicho, al del jugador). En ese momento solo pensé «Ta’ buenisimo que me pase por averigua!» Apagué el Playstation, saque el CD, lo guardé en su carátula, baje calmadamente, toque el timbre del apartamento de mi vecino y le devolví el CD. No me fuí sin antes decirle «Muchas gracias, pero no es verdad que a los 14 años yo voy a salir en el periódico -Joven muere de paro cardiaco por un juego sádico» por Dios, no!».
Con tantos avances tecnológicos, los juegos se han hecho cada vez más y más real. F.E.A.R, Resident Evil, Silent Hill, Alan Wake y Dead Space son solo algunos de los muchos títulos que han revolucionado este tipo de video juegos, muchos de ellos ni la persona más valiente es capaz de jugarlos solo. Si me faltó alguno por favor mencionarlo en los comentarios!