En serio, quítenme esto. Es una adicción un poco preocupante, principalmente viniendo de mi que nunca duro más de una o dos semanas jugando el mismo juego (a no ser que sea algo como Dead Trigger o N.O.V.A. 3). Para los que no lo han jugado (MANTENGANSE ASÍ), Candy Crush es el juego que ahora está acaparando todo el tiempo libre de muchos usuarios de Android, iOS y Facebook. Es una especie de Bejeweled en esteroides, y con dulces.
Es bien simple, el objetivo es hacer una linea de 3 o más dulces iguales, pero hay una serie de objetivos extras que debes cumplir. Estos son llegar a un puntaje X, destruir los cuadritos de gelatina, entre otras cosas. Lo difícil es que debes cumplir esto usando un limite de movimientos, los cuales dependen del nivel. Además, tienes solo 5 vidas y si las pierdes tienes que esperar 15 a 30 minutos para poder jugar otra vez, pedir a uno de tus amigos que te regalen una vida o comprarla.
Este juego está disponible tanto para Android y iOS como para Facebook, y lo mejor es que puedes jugarlo donde sea y, siempre y cuando uses una cuenta con el juego, podrás tener el mismo progreso en todos los dispositivos. Lo que avances en Facebook lo tendrás en tu móvil y vice versa. Tiene más de 100 niveles para mantenerte pegado por un buen tiempo.
Candy Crush puede volverse frustrante, pues hay niveles que son extremadamente difíciles, pero aún así no he conseguido la fuerza para borrarlo y olvidarme de él. Es probable que a tí te suceda lo mismo así te recomiendo que lo pruebes, es totalmente graits y muy bueno para matar el tiempo.