The Maze Runner es basada en la novela para jóvenes de James Dashner del mismo nombre. Se trata de la historia de Thomas un joven que se despierta en un elevador que lo transporta hacia un lugar desconocido llamado “The Glade” la cual es una gran área verde rodeada de unos enormes muros de concreto cubiertos por pastos largos y maleza. Al llegar Thomas es recibido por “The Gladers” un grupo de jóvenes que viven un una comunidad organizada comandados por su líder Alby.
Debo de admitir que fui al cine a ver la película con bajas expectativas pero al salir me lleve una agradable sorpresa. La película no solo es convincente sino que también es bien realizada por el director debutante Wes Ball. El reparto de jóvenes actores hizo un trabajo convincente encabezados por Dylan O’Brien (Thomas), Will Poulter (Gally), Thomas Brodie-Sangster (Newt), Aml Ameen (Alby), Ki Hong Lee (Minho) y Blake Cooper (Chuck). O’Brien hizo un trabajo aceptable con Thomas, pero los que mantienen la película a flote son los personajes secundarios. Will Poulter luego de su buena actuación en la comedia exitosa “We’re The Millers” toma el papel de Gally que por desgracias es el más unidimensional de todos pero Poulter hace más con menos y tiene una actuación más que sólida. El debutante Ki Hong Lee me impresiono bastante y les admito que Minho fue mi personaje favorito. Brodie-Sangster (Game of Thrones) y Cooper son especialmente convincentes en sus papeles que ayudan a traer cierta humanidad en una historia que fácilmente podría haber caído en clichés de películas para adolescentes. La nota discordante en el elenco lo trae la única fémina en el elenco principal Kaya Scodelario (Teresa). La joven actriz británica de 22 años tiene un fuerte parecido a la reina de las malas películas para adolescentes Kristen Stewart. El personaje de Teresa lucio frio, sin ningún tipo de emoción y Scodelario tenía la misma mirada perdida que posee Bella Swan en Twilight.
El componente más interesante de la película es el “Maze”, el laberinto mortal que se encuentra detrás de los enormes muros de concreto. Wes Balls logra presentarlo de manera tenebrosa y fascinante con el toque especial que trae “The Grievers” (bestias parte animal, parte maquina diseñadas para evitar que los jóvenes escapen el laberinto). El GGI en la película no es nada especial pero la cinematografía de Balls es buena y ayuda a un sentido de realismo en las escenas dentro del laberinto.
El género de las películas de libros para jóvenes adultos está plagado de disparates sin sentido que buscan quitarles el dinero a los fans de los libros, The Maze Runners excede estos parámetros gracias a que Balls toma lo que funciona en la novela de Dashner y crea un largometraje de ciencia ficción entretenido.