Para sorpresa de nadie, al menos que creas en las ‘profecías mayas’, la tendencia de convergir las cámaras fotográficas (tipos ‘point & shoot’) y las consolas de video juegos portátiles en los smartphones, continua a un ritmo cada vez más acelerado.

Este fenómeno se viene produciendo desde hace un tiempo pero a medida que las tecnologías mejoran el proceso de cambio es más notable. No es que estos nichos de mercado van a desaparecer de la noche a la mañana, ‘siempre’ tendrán un público, sin embargo un consumidor cada vez con más conocimiento va a preferir la flexibilidad de tener todo en uno sin contar el ahorro económico que supone este cambio.

Este año se ha visto como los smartphones agregan características que antes estaban reservadas para cámaras fotográficas, ejemplo de esto es la inclusión en hardware de un estabilizar de imagen óptico, pero también otras tecnologías como pureview que permiten la combinación de muchos píxeles en un solo píxel. Aún, más reciente, es la incorporación de un procesador de imagen que permite descargar al procesador principal de esta carga.

Con la incorporación de sensores de mayores resoluciones y lentes con mayor apertura que permiten capturar más luz, es solo cuestión de tiempo para que los smartphones desplacen al nicho de las cámaras de fotográficas de bajo coste.

En el caso de las consolas de video juego la historia no es muy diferente, primero está el lado de los smartphones que cada vez adquieren más capacidades de hardware, sobre todo en cuanto a poder de procesamiento de propósito general (CPU), así como del procesador de imagen (GPU). En los últimos años estas parte no solo han incrementado su poder exponencialmente, sino que a la vez consumen menos energía.

Esto es en cuanto al hardware, pero en cuanto al software cada vez más son los desarrolladores que aprovechan este poder, la facilidad que ofrecen estás plataformas, pero sobre todo las oportunidades en términos de remuneración económica al producir juegos de bajo costos pero lo suficientemente entretenidos para mantener al usuario ‘enganchados’; sí agregamos oportunidades en forma de modelos de negocio como el in-app purchase, que permiten la compra de módulos o características dentro de la misma aplicación, entonces la plataforma se vuelve aún más atractiva.

La tendencia a que este patrón continué produciéndose es solo cuestión de que la tecnología mantenga el curso actual y nada indica que vaya a cambiar en los próximos años. En el futuro próximo veremos como otros renglones convergen también dentro de este centro de control tecnológico que hoy día conocemos como smartphones.

*Otros en este caso indica teléfonos, lectores de libros y centros de entretenimiento multimedia.

Por Grimaldy Soto (Nehemoth)

Creyente ante todo, sarcástico, carente de sentido común, de corazón noble, misántropo y humano. @Nehemoth / www.nehemoth.com