Netflix ha sacado un nuevo documental llamado The Program: Cons, Cults and Kidnapping (El Programa: Sumisión, Sectas, y Secuestros). Este documental se basa en contar las horrendas historias sobre el abuso en la academia Ivy Ridge, un internado disciplinario que operaba al norte del estado de Nueva York, Estados Unidos.
The Program va narrado y dirigido por Katherine Kubler. Ella enseña lo que sobrevivío junto con sus compañeros en el internado Ivy Ridge describiendo los horrores que vivieron durante su tiempo en el programa y como lo han sobrellevado. La Academia de Ivy Ridge, era una institución comercializada como una escuela que ayudaría a adolescentes con problemas disciplinarios, pero en realidad muchos de los «estudiantes» en Ivy Ridge soportaban abuso mental y físico, y era obligados a participar en rituales pertenecientes a cultos.
Kubler fue forzada a vivir en Ivy Ridge desde Marzo del 2004 a Junio del 2005, ella describió como el programa asignaba a un equipo de transportación que en el medio del día iban a la oficina del director del colegio, le ponían esposas y se la llevan a la academia. Su madre murió cuando ella tenía 2 años, y en sus años de adolescencia bebía y actuaba de una manera rebelde en respuesta de su dura madrastra.
Con simplemente 3 episodios, el documental conlleva a varios estudiantes explicando su vida en el programa. Al transcurso de los episodios, se explíca el orígen de Ivy Ridge, que no era la única de su tipo. «Hice esta serie porque no había nada que pudiera ayudarme a explicar lo que me paso, a mis amigos, y a mi familia para advertirles sobre estos tipos de lugares… Y ahora, esa fuente existe» dijo Kubler al explicar porque la creación de este tipo de documental.
El Programa lleva a la audiencia a los pasillos de la institución en Ogdensburg, Nueva York, mientras sus estudiantes caminan por la academia. Visitando los pasillos donde estuvieron horas en computadoras antiguas investigando los videos interactivos que llegaron a ser los entrenamientos para el personal de la academia. Explicaron que no era fuera de lo normal ver a adolescentes dormir en colchones en los pasillos de la institución, y explican como llevaban a adolescentes que no cumplían con el programa a cuartos de aislamiento donde los obligaban a acostarse en el piso por horas. Otras manera de abuso fisico incluían a adolescente mientras iban al baño a hacer sus necesidades con la puerta abierta, prohibiéndolos hablar con otros o mirarse el uno con el otro, y penalizados si miraban afuera de las ventanas. Ejemplos de las reglas eran no sonreír, no reírse, no caminar afuera de línea.
Desde que cerraron Ivy Ridge en el 2009, cualquier persona puede acceder la propiedad abandonada. Mientras estaban ahí, Kubler encontró un extenso archivo de papeles y documentos, videos, y testimonios de testigos que estaban a simple vista, incluyendo archivos hecho de los estudiantes y imágenes de cámara de seguridad del personal dándole palizas a estudiantes. Kubler describe como los padres eran alentados para enviar a sus niños a escuelas como Ivy Ridge como un método para parar las rebeldías de los adolescentes. El documental enseña brochures que hacen ver la escuela como una preparatoria regular, con fotos de los estudiantes nadando, bailando y haciendo más deportes. Los sobrevivientes dijeron que esas fotos eran trucos de relaciones publicas porque la mayoría de veces no podían ni siquiera salir a las zonas verdes de la institución.
Instituciones como Ivy Ridge reclamaban como podían arreglan los comportamientos problemáticos de los adolescentes tras actividades terapéuticas, pero El Programa enseño el abuso que los traumatizó por el resto de sus vidas. A pesar de todo, los alumnos no salían con diplomas que podían usar en la vida real, Ivy Ridge no estaba licenciada, certificada o registrada con el Departamento de Educación de Nueva York, y los diplomas no eran transferibles a universidades.
El documental explicó que no era la única escuela que tenía el programa. Teniendo establecimientos con las mismas formas de disciplina en el estado de Arizona, en países como Costa Rica y muchos países en Europa y Latino América.